Los Santos nos ayudan a ser santos

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Los Santos nos ayudan a ser santos

Si nos paramos un momento a pensar, nos vendrán a la mente personas que a nuestro alrededor han brillado por alguna característica fuera de lo normal: su generosidad, acogida, alegría, sencillez, humildad, sinceridad, bondad… Estos son los que el Papa Francisco llama “Los santos de la puerta de al lado”, personas corrientes que nos “deslumbran” con alguna virtud especial y nos llegan a tocar el corazón, hasta el punto de animarnos a imitarlos, sin siquiera darse cuenta. Esto es lo que Dios quiere de nosotros y Jesucristo nos lo recuerda cuando nos dice: “Sed santos como vuestro padre es Santo”.
Una de las características de nuestra Espiritualidad Conyugal es la Regla de Vida, que nos ayuda a sacar lo mejor de nosotros. Conscientes de la dificultad que nos supone ésta, debido a nuestra fragilidad, cuidémonos de caer en el  desánimo si no conseguimos cambiar; ya que, es en ese momento, cuando estamos en disposición de mejorar.
Os invitamos hoy, que celebramos el día de Todos los Santos,  a recurrir a las personas que ya han pasado por esta lucha y la han superado. Os animamos a caminar de la mano de los santos que mejor puedan ayudarnos a cada uno pidiéndoles su intercesión en nuestro camino a la santidad. Por ejemplo, si nos cuesta vivir con alegría, podemos acudir a San Felipe Neri; si nuestra dificultad es el estudio, a Santo Tomás de Aquino; si nos falta perseverancia en la oración por lo que pueda necesitar alguno de nuestros hijos, a Santa Mónica. Pidamos ser abnegados a Santa Teresa de Calcuta; que se incremente en nosotros el deseo de hablar de Dios a los demás,  a San Juan de Ávila;  discernir, a San Ignacio de Loyola; descubrir a Cristo en el pobre, a San Alfonso; perdonar todo, a Santa Claudina de Thévenet; trabajar y orar, a San Benito; estar en silencio, a San Bruno; ser generosos, a San Juan Grande; tener una mente abierta y acogedora, a San Juan Pablo II; ser humildes y sencillos, a Santa Teresa del Niño Jesús; acercarnos a los pobres, a San Lorenzo; saber hacer lo ordinario de forma extraordinaria, a San José María Escrivá de Balaguer; no desanimarnos si no somos inteligentes, al Santo Cura de Ars, que nos ayudará a confiar todas nuestras debilidades al Señor para que sea Él quien nos transforme... Que Nuestro Padre San José y Nuestra Señora de los Hogares sigan siendo siempre ejemplo y apoyo para nuestra labor como esposos y padres.

La familia Mula Lupiáñez os desea un feliz día de todos los santos.